Típica de la región mediterránea, con existencias abundantes en el Atlántico Norte y la península arábiga. Crece mejor en zonas soleadas y de clima seco.
Su aroma inconfundible ha convertido a esta planta en la joya por excelencia de la aromaterapia. En Francia es muy utilizada para elaborar perfumes y aguas de colonia. También se utiliza para perfumar y ahuyentar los insectos de armarios y cajones, en los que se coloca un saquito con flores de lavanda.
La lavanda se utiliza en infusión para las jaquecas producto del agotamiento nervioso tomando una taza de esta infusión tres veces al día y, tomando una taza antes de acostarse, puede ayudar a combatir el insomnio. También resulta apropiada como digestivo tras la comida.